Después de la serie de catastróficas desdichas estábamos en la costa del norte de Perú. Aquí tuvimos tiempo para relajarnos, pero también para seguir con nuestro proyecto y seguir descubriendo la historia de Perú.

Conociendo Rusia desde Perú

Estuvimos una semana en Trujillo, en la que hicimos muchas actividades. Estuvimos con la ATA Agrupación Trujillana de Astronomía celebrando la semana mundial del espacio. Esta asociación es un grupo muy activo, todos los viernes organizan actividades en el observatorio de la Universidad Nacional, los viernes astronómicos. También estuvimos con los alumnos de física de la Universidad Nacional de Trujillo haciendo distintas actividades. El día de nuestra charla coincidió con el día del sol cenital en Trujillo, el sol estaba a las 12 en el cenit, y por lo tanto no había sombra. Por último estuvimos en el colegio Santa Rita de Jesús, con chicos muy curiosos y llenos de preguntas.

Durante esta semana Antonio y Victoria nos acogieron y nos hicieron sentir como en casa. Después de lo que nos había pasado necesitábamos sentirnos así. Fueron unos días de reponer fuerzas. Ellos estudiaron en Rusia, fueron en la época de la URSS y han ido muchas veces desde que esta se disolvió. Disfrutamos de sus múltiples historias y anécdotas de su vida en Rusia. Aprendimos muchas cosas que no sabíamos, normalmente los europeos no pensamos las cosas desde el punto de vista ruso. Creemos que siempre es bueno conocer las diferentes versiones de la historia.

Leyendo velozmente en Chepen

Seguimos nuestro viaje hacia el norte y paramos en Chepén, un pequeño pueblo comercial en la panamericana. Allí nos acogieron nuestros amigos Ray, Ingrid y Vincent. Con ellos recorrimos los arrozales de la zona, llenos de garzas y de mosquitos. El ayuntamiento de Chepén nos abrió las puertas para dar nuestra charla a distintos colegios.

Descubrimos el proyecto LEO VELOZ de Ray, enseña a leer rápido a chicos de la zona. Parece mentira, pero un chico puede leer un libro de 100 páginas en menos de 15 minutos. Nosotros tuvimos la oportunidad de comprobarlo,uno de sus alumnos aventajados leyó nuestro libro (de 60 páginas) en 8 minutos. La verdad es que nos encantaría poder leer tan rápido, a veces uno no lee por falta de tiempo.

Ciencia entre huertos

Estuvimos una semana en la Ecoaldea Eutopía. En medio de una zona en la que todo está lleno de basura y se utilizan pesticidas en exceso, está este pequeño oasis dónde se preocupan por el medio ambiente, utilizan abonos y pesticidas naturales y están muy comprometidos con la educación.

Pepe y su familia nos acogieron durante una semana, en la que no solo dimos nuestras charlas, sino que también trabajamos en el huerto. Estuvimos en escuelas rurales de la zona, escuelas de esas que tienen 20 alumnos en todo primaria. Nos encanta ir a este tipo de escuelas, donde los chicos apenas han oído hablar de galaxias y se asombran con todo lo que les contamos.

Fue una semana en medio de la naturaleza apartados de todo. La ecoaldea es un espacio muy lindo, parece mentira que en medio de una zona tan desértica pueda existir algo así.

Relax y amigos viajeros

Seguíamos con ganas de relajarnos en la playa, así que nos fuimos a los Organos. Sólo ibamos a estar un par de días, pero el lugar nos atrapó. Además se armó un lindo campamento con nuestros amigos de La Cumbancha Rodante, Soñar Despierto Para No Vivir Dormido, laruta.cl y Expedição Margarita.

Estacionamos la kombi en la playa y ahí pasamos la semana, paseando por la playa, dándonos largos baños en el mar y descubriendo la flora y la fauna del lugar. Las estrellas de mar y caracolillos enterrados en la orilla, los cangrejitos, que parecen de dibujo animado, los peces globo, y el plancton bioluminiscente que se dejaba ver tímidamente por la noche en la arena. En esta zona de Perú se unen una corriente cálida del norte y la corriente fría del sur, así que el agua tenía una temperatura perfecta, ni muy caliente ni muy fría.

Gracias a Oceanica Expeditions Perú pudimos ver ballenas, delfines, lobos marinos y nadar con tortugas. La temporada de ballenas se estaba terminando, las ballenas jorobadas vienen a esta zona atener sus crías, pero no hay mucho alimento para ellas. Así que cuando las crías están lo suficientemente fuertes para soportar un largo viaje, van hacia el sur. Pudimos ver una ballena macho coleteando, fue increíble. También nadamos con tortugas marinas, la verdad es que es algo de lo que tenía muchas ganas, pero me dio mucho miedo. Las tortugas eran enormes, ¡igual de grandes que yo! No deben tocarse, ya que tienen una capa protectora en el caparazón, pero era difícil no hacerlo, se acercan mucho a ti. Fue una experiencia única e increíble, aunque la sensación de verme rodeada de tortugas no me gustó mucho.

La Pachamama está sucia, otra vez

Los últimos días en Perú los pasamos entre Mancora y Zorritos. Aunque las fotos parezcan muy idílicas,la realidad es que estaba todo muy sucio (aparté unas cuantas botellas para la foto) y de las hojas de palmera bajaban hormiguitas que querían montar un hormiguero en la kombi. No siempre todo es tan fantástico y maravilloso como parece en las fotos.

Tanto en Bolivia como en Perú hemos visto mucha suciedad, pero el norte de Perú se lleva la palma. Los costados de la ruta parecían continuos vertederos. Entiendo que en estas zonas antiguamente no se consumían plásticos, sus deshechos eran mayormente orgánicos y no había problema en tirarlos al suelo. Lo que no entiendo es que los gobiernos no hagan nada para cambiar esta situación. Los sistemas de recogida y tratamiento de basuras, donde los hay, son ineficientes e inútiles. Es necesario que los gobiernos tomen medidas y cambien la mentalidad de la gente. Mientras escribo esto, estamos en Ecuador y vemos un paisaje totalmente diferente, sin (casi) basura, lo que demuestra que es posible tener paisajes libres de basura, si las autoridades están interesadas.

Adios Perú, Hola Ecuador

Salimos ya de Perú, un país en el que hemos tenido unos cuantos percances, pero lo hemos disfrutado mucho estos tres últimos meses. Hemos hecho muchos amigos, divulgado ciencia en todos los lugares que hemos podido, disfrutado de la rica comida peruana, de sus lindas montañas y de sus interminables playas.