Hoy hace exactamente dos años que nos subimos a un avión a Buenos Aires para empezar esta aventura. Salimos de casa con nuestras mochilas y muchas ganas de recorrer el mundo divulgando ciencia. Este aniversario nos pilla en España, rodeados de nuestra familia y amigos. Estamos cargando las pilas para volver a Panamá, dónde nos espera Vera, para seguir recorriendo el mundo divulgando ciencia.

En estos dos años el proyecto ha ido creciendo, gracias a todas las personas que nos hemos encontrado en el camino. Hemos recorrido 10 países (aunque en Chile y Brasil apenas estuvimos) en los que hemos dado 258 charlas en 158 instituciones a más de 12.500 personas.

Recorrido

Hay viajeros que sueñan con ir de Ushuaia a Alaska, que se proponen recorrer un continente o tienen alguna meta. Nosotros no, el objetivo del viaje siempre ha sido viajar divulgando ciencia. Al principio con la mochila íbamos donde queríamos, cuando queríamos. La idea original era ir hacia el sur por la ruta 3 y después al norte por los Andes, por la mítica ruta 40. Ese plan cambió por ir a pasar las navidades a Buenos Aires con la familia de Ángel. Después al comprar la kombi todo cambió de nuevo.

Al principio no teníamos ni idea de mecánica (ahora tenemos un poco más, pero siempre es poco) y los primeros meses en kombi fueron duros. Ahora ya si nos quedamos parados en medio de la nada no nos asustamos, tenemos suministros y una cama, siempre aparece alguien para ayudar. Hemos aprendido a adaptarnos a las circunstancias y mantener la calma.

Al principio nos asustaban tanto los problemas con la kombi que no pensábamos llegar muy lejos, ni nosotros ni nadie. Viendo todos los problemas que teníamos, sólo nos propusimos llegar a las cataratas del Iguazú. Una vez allí, Paraguay estaba al lado, y si no era entonces, ¿cuándo íbamos a ir a Paraguay? Las montañas de colores del noroeste argentino estaban cerca. Estando ya a más de 2.000 metros, Bolivia ya no asustaba tanto. Una vez cruzado el altiplano boliviano sin incidentes, llegar a Perú era pan comido. Sobrevivir al incendio que tuvimos en Perú nos hizo creer que podíamos llegar a Colombia.

Y así fue, recorrimos toda Sudamérica. Y la pregunta era, ¿queremos seguir? Cruzar a Centroamérica no era tan fácil ni tan barato, había que meter la kombi en un barco.

Y ya que estábamos claro que queríamos seguir, queríamos seguir viajando divulgando ciencia. Pero no todo viajando es bueno, echábamos mucho de menos el jamón y las tapas, bueno y la familia y los amigos también. Así que decidimos que seguiríamos, pero sólo si íbamos un mes de visita a España.

Aniversario en casa

Con mucha pena nos despedirnos de Vera. Dejamos nuestra casa durante un mes y medio, y la dejamos en buenas manos, con 4 bolsas antihumedad y trampas para cucarachas. Quizás es un poco exagerado, pero hace mucho calor, hay mucha humedad y no queremos encontrar vida en la kombi cuando volvamos. ¿Cómo es volver a casa después de tanto tiempo?

Disfrutamos mucho con nuestra familia y nuestros amigos, necesitábamos verlos. Todos los días nos decían que nos quedáramos en España, que no volviéramos a Panamá. Y cuando veían que no nos iban a convencer, nos decían que volviéramos pronto. Y la siguiente pregunta era: ¿y cuándo volváis a España definitivamente? La verdad es que no tenemos claro qué haremos cuando volvamos, ni dónde vamos a vivir, pero tenemos todavía tiempo para averiguarlo.

Los últimos días llegó la pregunta trampa: ¿tenéis ganas de volver? Pues por un lado sí, y por otro no. La verdad es que teníamos ganas de volver a nuestra casa, a Vera, a tener otra vez nuestro espacio y seguir viajando. Pero por otro lado, en España se vive muy bien, viajar a veces puede ser incómodo y cansado. Pero bueno, tiempo para volver siempre hay, ahora toca seguir recorriendo el mundo.

Creciendo y aprendiendo

Durante estos dos años hemos aprendido mucho, hemos conocido muchas personas y vivido experiencias increíbles. Aunque seguimos siendo los mismos ha cambiado nuestra manera de ver el mundo. Ya nada nos parece imposible, puede parecer difícil, cansado, duro o largo, pero no imposible. Hemos visto de todo, conocido a gente increíble, y eso es algo que nos acompañará para siempre.

El proyecto también ha crecido. Al principio sólo íbamos a escuelas, después nos dimos cuenta de que a la gente le gustaba lo que hacíamos, empezamos a ir a universidades, planetarios, centros culturales… Aprendimos a vender nuestros libros y a hacer que el proyecto fuera sostenible.

Al principio nos daba vergüenza presentarnos. Nuestro lema es recorriendo el mundo divulgando ciencia. Nos preguntaban en cuántos países habíamos estado, y con una voz temblorosa decíamos en uno o en dos… Nos preguntaban en cuantas escuelas habíamos estado y con la misma voz temblorosa decíamos dos o tres…

Hubo quien nos dijo que eso que hacíamos no era normal. Efectivamente no es normal, no es lo que hace todo el mundo, es lo que hacemos nosotros. Después de dos años recorriendo el mundo divulgando ciencia decimos con voz bien fuerte, y sin atisbo de ese tono tembloroso del principio, que hemos recorrido 10 países y estado en 158 instituciones.

Futuro

Muchas gracias a todos los que nos habéis seguido y ayudado a llegar cada día un poquito más lejos. El objetivo ahora es recorrer Centroamérica y México, y como siempre seguir…

¡Recorriendo el mundo divulgando ciencia!