Diario de viaje

1001 días recorriendo el mundo divulgando ciencia

13 abril, 2020


Un lindo punto y final

Hemos recorrido el mundo divulgando ciencia durante mil y un días. Desde que llegamos a Argentina un 21 de septiembre de 2017 hasta el 13 de Abril que salimos de México han pasado exactamente mil y un días. En ese momento no lo sabíamos, pero nuestra última charla antes de que el mundo se parara fue bajo el arco de Santa Catalina en Antigua, con Acagua. Sin duda el lugar más bonito donde hemos dado una charla, y nuestra ciudad favorita del viaje.

Este es un lindo punto y final para esta aventura. Quizás no el que habíamos planeado, pero uno bonito al fin y al cabo. Y si algo nos ha enseñado este viaje es que las cosas no siempre salen como uno espera, que hay que aprender a adaptarse, a cambiar de planes sobre la marcha.

Última charla en Antigua
Última charla en Antigua

Recorrido

Han sido 300 actividades en 185 instituciones en 16 países con más de 14.600 personas. Hemos recorrido más de 32.000km, aunque es difícil de calcular cuando no te funciona el cuenta kilómetros.

Mapa recorrido y estadísticas del viaje
Mapa recorrido y estadísticas del viaje

Empezamos el viaje en un pequeño pueblo de la provincia de Buenos Aires, Saldungaray. Durante los seis meses que viajamos por Argentina nos enamoramos de sus increíbles paisajes, nos llenamos de dulce de leche, empanadas, asados y compramos helado por kilos. Nos fascinaron las montañas del sur de Chile y sus infinitos glaciares. Conocimos la hospitalidad paraguaya. Atravesamos los verdes campos uruguayos llenos de vacas. Recorrimos el altiplano boliviano, donde aprendimos mucho sobre diferentes culturas. Perú, donde levantas una piedra y te aparecen restos de una nueva civilización. Ecuador, donde puedes desayunar en la selva, comer entre volcanes y cenar en la costa. Llegamos a Colombia, donde nos enamoramos de su gente. Nosotros tomamos un avión y Vera un barco para llegar a Centro América, evitando el tapón del Darién. Recorrimos Panamá y su canal, Costa Rica y sus parques naturales, Nicaragua y sus lagos y volcanes, Honduras y sus maravillosas islas y playas paradisíacas, El Salvador comiendo pupusas, y Guatemala, el corazón del mundo maya.

En este tiempo aprendimos muchas cosas y también tuvimos algunos problemas. Y es que durante el viaje te puede pasar de todo, te pueden salir las cosas mal a veces. Lo importante es no rendirse, aprender y hacerlo mejor para la siguiente. Si todavía no han visto la entrevista que nos hicieron nuestros amigos de XinoXano, ahí contamos un poco más de cómo es la vida en una kombi. La entrevista más divertida que nos han hecho nunca.

Ana y Ángel en la kombi
Ana y Ángel en la kombi

Ventajas e inconvenientes

Nos encanta recorrer el mundo divulgando ciencia, pero como todo, tiene sus ventajas e inconvenientes.

Las ventajas son más obvias supongo. Conocer lugares increíbles, hacer muchos amigos, aprender de diferentes culturas, divulgar ciencia y probar comida de muchos sitios diferentes.

Una de las principales desventajas es estar lejos de la familia y los amigos, en fechas señaladas tú no estás, la gente tiene hijos cuando tú no estás, se casa, siguen celebrando cumpleaños, navidad… Durante el viaje hemos hecho muchos amigos, pero eso también es difícil, despedirse continuamente de gente pega duro. Aunque sólo convivamos con las personas unos días, llegamos a tener relaciones muy intensas y es muy difícil decir adiós todo el rato, y saber que a muchas de esas personas a las que aprecias quizás no las vuelvas a ver nunca. Otro de los inconvenientes es estar constantemente fuera de tu zona de confort, no tener una rutina, no saber dónde vas a dormir mañana, qué vas a hacer mañana, si la kombi va a arrancar, la inestabilidad económica, esa incertidumbre continua genera estrés.

Durante mucho tiempo nos quedamos con lo bueno, con todas esas familias que nos acogieron como a uno más, todos esos mecánicos que nos ayudaron sin cobrarnos un peso, todas esas personas que nos abrieron las puertas de su casa de par en par, todas las que nos ayudaron a organizar actividades y divulgar ciencia, todos esos héroes anónimos que con pequeños actos transforman sus comunidades y son un ejemplo a seguir.

Sin embargo, llega un momento que las desventajas pesan, que el no ver a la familia y la inestabilidad pesa. Así que decidimos que México iba a ser el último país de este recorrido.

Cambio de planes

Estábamos en Guatemala cuando en España se empezaron a poner serias las cosas. Lo primero que hicimos fue ir a México, a Bacalar, porque nos quedaban sólo 10 días de permiso en Guatemala. En México alquilamos un apartamento y la idea era quedarnos hasta que se calmaran las cosas para seguir con el viaje.

Pero las cosas no siempre suceden como uno quiere, como nos pasó a todos, tuvimos que cambiar de planes. De un día para otro decidimos terminar el viaje, vender la kombi y volver a casa. Al fin y al cabo, este viaje nunca tuvo un destino, el propósito siempre fue disfrutar del camino divulgando ciencia, y lo hemos conseguido. Nosotros hemos aprendido mucho y hemos intentado dejar algo de nosotros en cada lugar que hemos visitado. Uno de los mayores aprendizajes es que a pesar de lo que digan en la tele, la gente es buena.

Despedida de Vera
Despedida de Vera

Dejamos a Vera con Jorge, un mecánico de Volkswagen de Chetumal, que intentará venderla. Nos dio mucha pena separarnos de ella, pero así han sido las cosas. Nos llevamos la matrícula (la placa/ patente), un pedacito de Vera estará siempre con nosotros.

¡Muchas gracias a todos!

De todas maneras no penséis que esto se termina aquí, seguiremos divulgando ciencia, aunque no de manera itinerante. Os espero próximamente en mi canal de YouTube.

De momento nos quedamos sin conocer México, pero nos quedamos con lo bueno de toda esta aventura, con todas esas personas que nos han abierto las puertas de su casa y de su corazón, muchas gracias a todos los que nos habéis ayudado a organizar actividades y a llevar la ciencia a todos los rincones, sin vosotros no lo hubiéramos conseguido.

Hasta siempre!
Hasta siempre!